Permanente abuso de poder de operadores.

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Soy un asiduo usuario de sus servicios de chat. De hecho, los visitaba antes de la creación y actualización de su sitio como Chatéalo.

Si bien progresaron las herramientas para la fluidez de las comunicaciones, observo con pesar, en particular en la Sala Chile, una situación seria y constante, que arriesga la calidad de esta sala y en cualquiera otra donde sucede: el permanente abuso de poder de algunos de los operadores, tales como Gonza’, Leslie, Baal y Alita.

¿En qué consiste este abuso? Paso a explicar.

Primero que todo, la sala tiene por nombre Chile. Eso significa que debe ser lo más representativa de la población nacional. En principio, están todas y todos invitados a ella, nacionales, extranjeros, mujeres, hombres, adolescentes, adultos, ancianos, profesionales y no, entre tantas otras categorías.

Sin embargo, no todos pueden chatear ahí. Si en el nick de una persona se aprecia la palabra homosexual, bisexual, trans o travesti, esa persona es inmediatamente derivada a otra sala y baneada. ¿Sobre la base de qué regla se puede expulsar a alguien por tener una orientación sexual o identidad de género determinada?

El retrógrado y absurdo argumento de estos operadores es que hay una sala reservada para las personas «alternativas». ¿Puede una persona ser alternativa a otra? Por lo demás, eso significaría que ningún extranjero podría chatear en Sala Chile, lo que no ocurre.

Gonza’, Leslie, Baal y Alita y otros operadores han hecho de esta sala un lugar de homofobia y transfobia, donde solo pueden existir personas heterosexuales con comentarios heterosexuales, sin importar el escandaloso o reprochable contenido de dichos comentarios.

Si es posible pasar el filtro del nick, apenas al escribir algo que implique o evoque homosexualidad, bisexualidad o transexualidad, tal persona es de inmediato baneada, lo cual no aplica para quien busca explícitamente a alguien del sexo opuesto.

Al ser la censura así de fuerte, es aun peor exponer la flagrante, odiosa e inadmisible violación de derechos constitucionales, haciendo uso de la libertad de expresión, que también es un derecho con ese rango. Quienquiera que dé cuenta de la profunda, dañina, inaceptable discriminación que viven las personas homosexuales, bisexuales y trans en Sala Chile es automáticamente baneado, y, en la sesión siguiente, hostigado, por la simple razón de demandar justicia y respeto a las personas por ser personas.

Si les interesa mantener la calidad del sitio y enriquecerlo con la diversidad en el sentido más amplio del término, permitiendo el ingreso y el intercambio escrito de personas, lo que a su vez permite construir una sociedad mucho más avanzada y sana, deben fiscalizar cómo estos operadores y otros hacen increíble e inaguantable abuso de sus poderes, a vista y paciencia de todos, con argumentos crueles, brutales y anacrónicos.

Asimismo, sugiero que todos esos operadores sean suspendidos de sus funciones, pues si revisan acuciosamente las pretéritas conversaciones en la pantalla pública, se percatarán que el abuso ha sido continuo, injustificado, infundado o fundado en razones atroces y atávicas, lo cual solo manifiesta que todos ellos no están preparados para administrar poder toda vez que devienen en déspotas que cercenan la unión entre los usuarios y violentan su dignidad.

Con la sola lectura de este reclamo, ya les agradezco profusamente, pero clamo porque tomen acciones concretas para proteger a los usuarios que se han encariñado con su sitio y contribuyen a que siga existiendo.

¡Muchos saludos!